Un "Clásico" igualado

El único partido que hace bien el Madrid, y, casualmente, es contra el Barcelona. ¿Casualmente? ¡No! Llevo muchos meses diciendo que el dispendio económico que Florentino efectuó este verano tenía como fin primordial eclipsar los logros del Barça, ¿por qué debería extrañarnos que, por fin y frente a su bestia negra, se les viera un poco de fútbol? En algunos momentos de la primera parte del partido de ayer, confieso que llegué a pensar que ese juego balbuceante que hasta aquel momento habían descrito todos los cronistas (yo jamás los veo jugar) no era sino una cortina de humo, una estratagema, una trampa que bien hubiera podido ser mortal y cuyo único objetivo habría sido pillar al Barcelona con la guardia baja. Porque, seamos sinceros, Kaká y Cristiano casi se nos meriendan con patatas en el primer tiempo, ¿o no?. Creo que el propio Guardiola picó el anzuelo y se vio sorprendido, como sus pupilos, por la defensa adelantada y los pases largos y precisos que a punto estuvieron de aprov...