Ahora nos enteramos que el Barça va a por Arteta. Válgame Dios. Hace unas semanas se daba por hecho que Cesc tenía pie y medio en Barcelona, y que, rendidos a la evidencia de su marcha, Wenger y compañía se habían fijado en Mikel Arteta, joven jugador del Everton, para reemplazarle. Ahora, tras la enésima negativa del técnico gunner, es el club catalán quien va a por el centrocampisca de origen vasco. Qué estupidez, digo yo. Sandro, me estás defraudando, y en demasiado poco tiempo. Parece que vamos dando tumbos a lo loco, palos de ciego. Primero se dice que, según se eleve el montante a pagar por Cesc, se podrá fichar a un mayor o menor número de futbolistas, éso sí, de perfil bajo (recordemos: un extremo izquierdo, un centrocampista defensivo y un central) ; luego, el flamante director deportivo Andoni Zubizarreta dice que "o Cesc o nada", insinuando que las necesidades se cubrirían con chicos de la cantera. Ahora se ha sabido que el Barça podría ir por el mismo jugador que interesaba al Arsenal si no se podía contar con Fábregas. De verdad, da muy mala imagen que no se tenga clara una política a seguir. Dirigentes del Barcelona, por favor, ponéos de acuerdo vosotros mismos, y no filtréis a la Prensa noticias tan contradictorias, que a veces parece que estamos flirteando con el ridículo. Por lo demás, nuestros chicos ya están en Corea, donde mañana jugarán un partido contra una selección de la Liga "K". Este partido tiene mucho morbo, entre otras cosas porque se disputa a las 13:00 horas (una de la tarde), hora española. ¡A ver que me invento para escaparme del trabajo y poder disfrutar el encuentro! Messi, con evidentes signos de jet lag, encabeza la expedición por decisión contractual, y es la máxima extrella del bloque junto con Ibrahimovic y Alves, ya que los Campeones del Mundo (Iniesta, Villa, Xavi, etc.) no vuelven al trabajo hasta el lunes que viene. Esperemos que las televisiones y periódicos le dediquen a nuestra gira asiática la misma cobertura mediática que se le está deparando al periplo californiano del Madrid, que de verdad da angustia ver a cada momento a Mourinho y a Cristiano hasta en la sopa, sin otra razón que mostrarnos su última mueca o su última bravuconada.
Ahora nos enteramos que el Barça va a por Arteta. Válgame Dios. Hace unas semanas se daba por hecho que Cesc tenía pie y medio en Barcelona, y que, rendidos a la evidencia de su marcha, Wenger y compañía se habían fijado en Mikel Arteta, joven jugador del Everton, para reemplazarle. Ahora, tras la enésima negativa del técnico gunner, es el club catalán quien va a por el centrocampisca de origen vasco. Qué estupidez, digo yo. Sandro, me estás defraudando, y en demasiado poco tiempo. Parece que vamos dando tumbos a lo loco, palos de ciego. Primero se dice que, según se eleve el montante a pagar por Cesc, se podrá fichar a un mayor o menor número de futbolistas, éso sí, de perfil bajo (recordemos: un extremo izquierdo, un centrocampista defensivo y un central) ; luego, el flamante director deportivo Andoni Zubizarreta dice que "o Cesc o nada", insinuando que las necesidades se cubrirían con chicos de la cantera. Ahora se ha sabido que el Barça podría ir por el mismo jugador que interesaba al Arsenal si no se podía contar con Fábregas. De verdad, da muy mala imagen que no se tenga clara una política a seguir. Dirigentes del Barcelona, por favor, ponéos de acuerdo vosotros mismos, y no filtréis a la Prensa noticias tan contradictorias, que a veces parece que estamos flirteando con el ridículo. Por lo demás, nuestros chicos ya están en Corea, donde mañana jugarán un partido contra una selección de la Liga "K". Este partido tiene mucho morbo, entre otras cosas porque se disputa a las 13:00 horas (una de la tarde), hora española. ¡A ver que me invento para escaparme del trabajo y poder disfrutar el encuentro! Messi, con evidentes signos de jet lag, encabeza la expedición por decisión contractual, y es la máxima extrella del bloque junto con Ibrahimovic y Alves, ya que los Campeones del Mundo (Iniesta, Villa, Xavi, etc.) no vuelven al trabajo hasta el lunes que viene. Esperemos que las televisiones y periódicos le dediquen a nuestra gira asiática la misma cobertura mediática que se le está deparando al periplo californiano del Madrid, que de verdad da angustia ver a cada momento a Mourinho y a Cristiano hasta en la sopa, sin otra razón que mostrarnos su última mueca o su última bravuconada.
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